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Cómo usar CLA en fases de reducción calórica
La reducción calórica es una estrategia comúnmente utilizada en el ámbito deportivo para lograr una disminución en el porcentaje de grasa corporal y mejorar la composición corporal. Sin embargo, este proceso puede ser desafiante y requiere de una combinación adecuada de nutrición y entrenamiento. En este sentido, el ácido linoleico conjugado (CLA por sus siglas en inglés) ha ganado popularidad como un suplemento que puede ayudar en la reducción calórica. En este artículo, exploraremos cómo usar CLA en fases de reducción calórica y su efectividad en este proceso.
¿Qué es el CLA?
El CLA es un ácido graso esencial que se encuentra en pequeñas cantidades en la carne y los productos lácteos. Sin embargo, también se puede encontrar en forma de suplemento. Se compone de una mezcla de isómeros del ácido linoleico, siendo los más comunes el ácido cis-9, trans-11 y el ácido trans-10, cis-12. Estos isómeros tienen diferentes efectos en el cuerpo y se cree que el ácido cis-9, trans-11 es el responsable de los beneficios para la salud del CLA.
El CLA ha sido objeto de numerosos estudios en los últimos años debido a sus posibles efectos en la salud y el rendimiento deportivo. Se ha demostrado que tiene propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y anticancerígenas. Además, se ha sugerido que puede ayudar en la reducción de la grasa corporal y mejorar la composición corporal.
CLA y reducción calórica
La reducción calórica se basa en un déficit energético, es decir, consumir menos calorías de las que se queman. Esto puede lograrse a través de una combinación de dieta y ejercicio. Sin embargo, este proceso puede ser desafiante ya que puede llevar a una pérdida de masa muscular junto con la grasa corporal.
Se ha sugerido que el CLA puede ayudar en la reducción calórica al aumentar la oxidación de grasas y disminuir la acumulación de grasa en el cuerpo. Además, se ha demostrado que tiene un efecto positivo en la composición corporal al aumentar la masa muscular y disminuir la grasa corporal en individuos que realizan ejercicio y siguen una dieta hipocalórica (Blankson et al., 2000).
Un estudio realizado en atletas de resistencia encontró que la suplementación con CLA durante 6 semanas resultó en una disminución significativa en el porcentaje de grasa corporal y un aumento en la masa muscular magra (Kamphuis et al., 2003). Además, otro estudio en mujeres con sobrepeso y obesidad encontró que la suplementación con CLA durante 12 semanas resultó en una disminución en el porcentaje de grasa corporal y una mejora en la sensibilidad a la insulina (Gaullier et al., 2004).
¿Cómo usar CLA en fases de reducción calórica?
La dosis recomendada de CLA para la reducción calórica es de 3 a 6 gramos por día. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la efectividad del CLA puede variar dependiendo de la dosis y la duración de la suplementación. Se ha demostrado que dosis más altas de CLA (más de 6 gramos por día) pueden tener efectos negativos en la salud, como aumentar los niveles de colesterol LDL (Tricon et al., 2004).
Además, es importante tener en cuenta que el CLA no es un suplemento milagroso y no debe ser utilizado como una solución rápida para la reducción calórica. Se recomienda combinar la suplementación con CLA con una dieta adecuada y un programa de entrenamiento bien estructurado para lograr los mejores resultados.
Es importante mencionar que el CLA puede tener interacciones con ciertos medicamentos, por lo que es importante consultar con un profesional de la salud antes de comenzar a tomarlo.
Conclusión
En resumen, el CLA puede ser un suplemento útil en fases de reducción calórica al aumentar la oxidación de grasas y mejorar la composición corporal. Sin embargo, es importante tener en cuenta que su efectividad puede variar dependiendo de la dosis y la duración de la suplementación. Además, es importante combinar la suplementación con una dieta adecuada y un programa de entrenamiento bien estructurado para lograr los mejores resultados. Se recomienda consultar con un profesional de la salud antes de comenzar a tomar CLA para asegurarse de que sea seguro y adecuado para cada individuo.
En conclusión, el CLA puede ser una herramienta útil en la reducción calórica, pero no debe ser utilizado como una solución rápida o sin la supervisión de un profesional de la salud. Se necesitan más investigaciones para comprender completamente los efectos del CLA en la reducción calórica y su seguridad a largo plazo.
¡Recuerda siempre consultar con un profesional de la salud antes de comenzar cualquier suplementación y seguir una dieta y un programa de entrenamiento adecuados para lograr tus objetivos de reducción calórica de manera segura y efectiva!
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